Parquet

El parquet tradicional es un pavimento de madera natural formado por tablillas de diferentes medidas encoladas al pavimento base, pudiéndose elegir el diseño de colocación: a junta perdida, en espiga, damero o enmarcadas.

Se fabrica de diversas maderas y tamaños de tablillas y una vez que se han pegado, hay que lijar antes de barnizar, para que se eliminen los relieves que puedan quedar tras su colocación y obtener así un acabado liso.

Habitualmente, se termina el proceso con el barnizado (en otros aceite/ cera). Se utiliza barniz ecológico al agua, que protege la madera manteniendo sus propiedades naturales. Está compuesto por materias primas de origen vegetal y/o mineral por lo que su impacto medioambiental es muy inferior al de los productos sintéticos, derivados del petróleo. Permite transpirar a la madera, lo que evita la formación de hongos y bacterias.

El proceso de restauración de parqués antiguos es similar: lijado de la madera, retirando cualquier resto de barniz o cera y aplicación del barniz.

Tarima maciza tradicional

 Es también un pavimento de madera formado por tablas de dimensiones mayores y más grueas que las del parquet. Se fija al suelo con adhesivos, con rastreles o con manta aislante adhesiva. Una vez instalado, se procede igual que en el parquet: lijado y barnizado.